jueves, junio 22, 2006

Sexo sin Amor

Ya son las 00 en algún lugar, pestilente y desastrozo de almas somnolientas, desoladas que buscan un simple abrazo, una caricia a sus usados cuerpos, llenos de polvos y cicatrices..ansiosos también de una más, una, solo una.¿Masoquismo? Simple amor y un bello gusto por la vida...amar la vida es demasiado simple, ¿Quién no ama la vida, que levante la mano?...claro, algunos depresivos que siempre sobran, dirán..."se discute" y por cierto levantarán con el ceño fruncido y una mueca extraña del labio inferior, su mano derecha.
Quedamos entonces los que amamos la vida, brindando por ella, bailando todos sus ritmos, disfrutando sus acordes y porque no, adoloridos también por sus desafinos.
A veces me pregunto, oye tu, sí tu: ¿porque te gusta tanto desafinar?.
He concluido que los ritmos felices me aburren, me desconciertan, me generan crisis de déficit atencional.
¿Qué tiene que ver todo este preludio con el titulo?
La verdad es que no sé, solo sé que a mis años, el sexo sin amor me desagrada, me asquea, lo disfruto también porque soy humana y me contradigo...al final del polvo, despúes del último suspiro, cuando miro al costado la cama vacía y unos deseos de dormir insostenibles...me detengo y pienso ¿valió la pena?..claro, una notita para el anuario y ¿qué quedó?, un sabor amargo, porque entregar el cuerpo así como así, no es cosa fácil....¿conservadora, tradicional? sí, lo soy y qué...espero no me pasen al tribunal de disciplina por eso..lo cierto es que amo mi cuerpo, mi alma, mi yo entero, medio pifiado a veces: obsesa, reiterativa, preguntona, inquisidora, taxativa, absoluta, con demasiados juicios que sobran, egoísta, hablo más de la cuenta, digna siempre digna...también tengo la mirada dulce, mi alma parece que aún no atina que ya cumplí treinta y que no puede andar como perna de 15 por la vida, confiando, confiando...creo, creo, confío, sé abrir los brazos para acoger todo lo que mi boca no hace, también sé decir a otros y a mi: "perdón, me equivoqué".