Ciertamente que la imagen de un jugador de fútbol americano en su carátula limitaban mi interés....por el juego aquel cotidiano (con o sin cinismo, por todos practicado) de las imágenes y los prejuicios....Sábado en la tarde, recomendación de mi hermana y ya....podría decir que es "bella" o "bonita"...mis adjetivos preferidos para denotar el encanto...., me hizo llorar desde la imagen tres hasta la última....pero vamos, no por el cuento de la caridad, de la mujer blanca y millonaria que recoge a un negro pobre y desahuciado por la vida y su "conocido destino"....por la dignidad, el honor, por el reconocimiento a los talentos....porque si despues de constatar alguna realidad que no nos gusta, podemos tambien revelarnos cerrando los ojos por tres segundos y al abrirlos otra vez.... volver a mirar que "el mundo, es un buen lugar". Eso es...la necesidad de saber....de volver a creer....tal vez la mala traducción del título es un intento por mostrarnos que todos los sueños son posibles...cuando se asome una duda...cierre los ojos...y cuente: uno, dos, tres....y ya está....el yo, es otro....y el sueño y su cumbre...más cerca...siempre... más cerca...
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