domingo, julio 30, 2006

Amigos del Alma y Amores Perros



Qué gran descubrimiento es la amistad, saber que se cuenta con alguien, que no comparte ni tu sangre ni tu cama, precisamente para aquello, para el maravilloso ejercicio de compartir, una sonrisa, que tímida se asoma, para transformarse en carcajada; ojos vidriosos también, cuando el rocío de una mañana nos dió justo donde dolía...saber que el mundo no sólo es redondo y lleno de relieves incomprensibles que nos hacen caer si no miramos abiertos enteros, tambien es un universo infinito, deliciosamente infinito...
Cuando tenía catorce años, una de mis mejores amigas, que además era mi prima, escribió unos panfletos sobre mí, los esparció por toda la ciudad, hasta que llegó el rumor al colegio donde ambas éramos compañeras de curso...a ella la expulsaron y yo terminé en el sicólogo en una terapia que siento recién termina...mientras hacía unos dibujos extraños, el sicólogo me decía "en el mundo hay gente buena y gente mala (teoria que al cabo de los años cambié por "los vacas y los no vacas") debes aprender a mirar bien y saber en quién puedes confiar y en quién no"...esta simple frase nunca se me olvidó, porque aunque mi aspecto sea algo rudo, porque el tono de mi voz es categórico como mis arrebatos que al final se transforman en autoboicot (esto del autoboicot es un plagio, espero no recibir castigo)...si me dan cinco minutos...es posible que necesite algo más que eso también, los otros constatan que en mi, no hay más que dulzura y buenas intenciones...que camino (si también corro más de lo deseado) confiando...confiando..sin mayores filtros, eso al final me ha traído más de un degarro a la aorta...Hoy, despúes de 16 años, en los que siento nunca valoré la amistad, siento que he comprendido la necesidad de tener amigos, la alegría de tener con quién compartir lo que nos deja el día y la noche, es un regalo impagable, que baste una llamada para que los amigos vengan a regalarte su tiempo, su oreja, su abrazo desinteresado...es algo que en estos días me ha hecho sentir y saberme vulnerable, he llorado un rato, pero ya no lloro más, recogo la palabra de Antonio "nada de andar llorando por los rincones, a nadie le concedas el derecho de verte frágil, demúestrate a ti misma que eres fuerte, que un día, un par de episodios en la vida no le gana la partida a tu natural alegría", las palabras de la Clau "vente pa cá no seai tonta, ni melodramática, hay cosas mucho más importantes" también las de la Moni "pucha si te vai me pondré re triste porque te voy a extrañar un montón, porque gente como tú no se encuentra todos los días", el pragmatismo de la Berna cuando me decía "piensa en la reencarnación, tienes la oportunidad de reencarnarte cuantas veces quieras, siendo eso sí, cada vez mejor de lo que ya eres", las de la Ale "lo que sabes, lo que has aprendido, lo talentosa que eres, eso, nadie te lo puede quitar", la preocupación de la Pili diciéndome "amiga, estoy en Isla de Pascua, tu sabes que estoy contigo", también Sandra que en medio de sus problemas mucho más grandes que los míos ha llegado corriendo a mi departamento, tambien Andrés con la excusa del artista, de saber que serlo es estar en permanente ruptura, él decía "tu sabes que el mundo este, el país este, es demasiado pequeño para almas como las nuestras", la dulce Meli que procuró no comiera sola en toda la semana, mi amiga Maca que aunque no comparta su catolicismo me roció con agua bendita de un frasquito de las monjas de no sé donde, con su dolor compartido frente a una injusticia y su eterna fe en que al fin encuentre un hombre que me contenga y me quiera profundamente como yo me merezco, Ignacio diciéndome "a ver cabra, tu sabis que lo que te sobra es inteligencia, así es que partiste a dar la cara no más, el resto lo arreglamos en el camino". Giacomo Soriano que aunque no estuvo porque hay otros líos de por medio, aunque lo "castigue" con palabras duras y demandantes sin derecho alguno, se arma de paciencia para intentar comprender mis arrebatos de estos días, aún no sé si él es mi amigo si comprenderá realmente mi desgarro en los que él es inocente (aunque existan declaraciones que intenten decir lo contrario), yo lo siento mi amigo, mi cercano, aunque en algún momento ambos hayamos traicionado la bella amistad que teníamos...y así... con mi alma agradecida por conocer personas como estas, también acongojada porque a ratos siente que su ancla se perdió...mañana me levantaré antes que el sol, para recibirlo bien despierta, para que los embates de los días no me soprendan desprevenida y somnolienta, con letargo y entregada a la rutina, porque esa, no soy yo....porque yo, soy la reencarnación de una guerrera, que nunca supo matar más que la tristeza, el agobio, las pobrezas y carencias de otros...sé que ahora, ese espíritu no me abandonará, para esta vez, matar los míos.

3 comentarios:

Juan Pablo Belair dijo...

Agradecido de su relato íntimo y autodescriptivo pienso que, más que los contenidos de cada uno de los comentarios de sus amigos del alma, la pura posibilidad de tenerlos aniquila cualquier efecto de amor perruno, dejándonos solo el sumo feliz para guardarlo en frasco chico... así, si la vida pudiera mirarse longitudinalmente, bienvenido sean ellos que nos dan la posibilidad de sentirnos bajo el calor de una casa hecha de piel, carne y huesos de esos amigos de “verdad”.
Solo una pregunta... ¿no fue ud. la que habló de la prolificidad de los estadios tristes?

Anónimo dijo...

Pauli: sólo puedo decirte que tengo la fuerte intuición de que, a partir de este cambio, te esperan cosas infinitamente mejores. A vces el mejor favor que le pueden hacer a una es dejarla ir, porque se te abre por delante un mundo preñado de posibilidades.
Vidia

Anónimo dijo...

Amiga:
Como te comente el lunes (previo a la inundación que me tiene de allegada en casa de ni cuñada, pero todos bien y felices), las cosas a veces en la vida son más simples de lo que uno cree.
Tal vez todas estas injusticias y malas ondas te obligen a tomar un camino un camino que estaba pendiente por tus tierras, y que de otra forma nunca te hubieses atrevido a recorrer.
Yo sé amiga, solo puedo hablar desde mi humilde xperiencia, esa misma que me han enseñado que todos los cambios más drásticos en mi vida, han sido durísimos, dolorosos, pero también todos han sido para mejor, cosa que por supuesto me he dado cuenta con el tiempo...nunca tan sabia.
Escuche su voz interior, dele pelota a la intuición, y haga lo que tenga ganas de hacer.
Desde este rincon te ofrezco toda mi ayuda, mi cariño y mi amistad.
La quiero mucho, estes donde estés.
Claudia